En la
rueda de prensa celebrada el pasado viernes (24/3/2000) después del Consell de Govern, el presidente del Govern de les Illes
Balears, Francesc Antich, y la consellera de Innovación Tecnológica, Misericòrdia Ramon, anunciaron que habían denunciado ante
la Fiscalía un presunto caso de espionaje del anterior Govern presidido por Jaume Matas contra la Comisión de Urbanismo del Consell
de Mallorca.
Según informaron el presidente y la consellera, desde febrero de 1998 se enviaba una copia de todos los e.mails remitidos a la
Comisión de Urbanismo del Consell de Mallorca, cuyo responsable era Francesc Quetglas, al correo electrónico
"svallori@gabpresi.caib.es", perteneciente a Sebastián Vallori, funcionario de confianza del anterior Govern.
Los hechos se descubrieron casualmente al darse de baja las direcciones de correo electrónico pertenecientes a cargos del anterior
Govern, lo que provocó que el director general de Relaciones con el Parlament del Govern, Valentí Valenciano, sospechara de algo
anormal cuando envío el 17 de marzo un e.mail al actual presidente de la Comisión de Urbanismo del Consell de Mallorca, Rafael de
Lacy, recibiendo un mensaje de replica del propio servidor del Govern en el que se comunicaba que el correo electrónico
"svallori@gabpresi.caib.es" no estaba operativo.
La empresa Baleares Innovación Telemática, S.A. (Bitel), participada por el Govern, por Telefónica y Sa Nostra, se encuentra
implicada en el asunto ya que controlaba entonces tanto el servidor del Govern como el del Consell. En el momento de iniciarse los
hechos denunciados, la presidenta de Bitel era Rosa Estaràs, que ocupaba la vicepresidencia del Govern presidido por Jaume
Matas.
El mismo viernes, el expresidente del Govern y actual líder del PP en Baleares, Jaume Matas, negó cualquier relación con los
hechos denunciados.
ACTUALIZACIÓN (26/03/2000):
Según informe interno de Bitel, que trascendió ayer, el jefe de sistemas de la empresa expone que la cuenta de correo
"president@urbanisme.cim.net" fue activada en febrero de 1998 siendo objeto de un redireccionamiento a la dirección
"svallori@gabpresi.caib.es", sin poder concretar la fecha en que se produjo el mencionado redireccionamiento, ni las personas
involucradas en los hechos.
Del informe de Bitel se desprende que las investigaciones judiciales deberán centrarse en aclarar en qué momento se produjo el
hecho denunciado, para poder activar las acciones penales pertinentes contra las personas presuntamente responsables.
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