El Bromuro de Metilo es un fumigante extraordinariamente tóxico para la capa de Ozono, utilizado en el tratamiento de semillas y almendras y en cultivos como la fresa, el tomate y el pimiento. Presenta un gran poder destructor frente a hongos, ácaros y bacterias, pero también puede llegar a bloquear el sistema respiratorio de animales superiores.
Artículo completo de Antonio Trias en
Salut i Força